martes, 12 de octubre de 2010

Prólogo

Desde mi nube se podía ver perfectamente la Tierra.

Siempre me fijaba en las personas, su destino está en mis manos; el mío es hacer lo que menos me gusta: matar, aunque Él dice que es por justicia.

De pronto oigo una voz a mi espalda sobresaltándome:
 
- Leah, es la hora - aquella voz parecía sacada de una película de terror, y siempre que la oía me estremecía de miedo. Sin duda era Él, mi amo.

Me puse rápidamente de pie y me apresuré a decir:
 
- Sí, señor -Al oír mis palabras dibujó una sonrisa maligna en su rostro y desapareció dejando una brisa helada que, al rozar mi cuerpo, hizo que un escalofrío recorriese mi espalda. Él sabía que estaba a punto de presenciar un espectáculo digno de ver, en el que la protagonista, por desgracia, era yo.

Alcé mis alas y eché una rápida mirada llena de envidia a la Tierra antes de empezar a volar hacia las Puertas del Cielo para cumplir mi misión una vez más.

1 comentario:

  1. Tu estilo tiene la frescura y la simpleza en el sentido vas al grano, explicas las expresiones, la escena e incluso ya dejas entrever un poco el objetivo y el cometido del personaje principal.

    =) Está muy bien.

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